Aquí las playas son preciosas, pero el sol es bastante más fuerte. A la primera playa que fuimos nos llevo una chica neozelandesa en coche. La conocí gracias a una compañera de clase y pudimos hablar incluso antes de que yo llegara a NZ. Grandes ventajas de internet ^^ Pasamos el día en la playa que era preciosa, nos bañamos y luego fuimos a comer al Burger Fuel, hamburguesería Neozelandesa donde descubres que su tamaño pequeño es nuestro tamaño grande. Y que las hamburguesas con piña están ricas.
Después del baño no me dio por volver a echarme crema, así que en cuanto llegue a casa me di cuenta de que tenía la espalda y las piernas por detrás de un tono rojo muy poco saludable. Así que cuando decidimos ir un par de días después a Takapuna Beach ya fui en plan de cámara en mano y nada de bañarse ni tomar el sol. Ahora la quemadura ha pasado a ser moreno y parezco un oso panda...
Carlaaaaaaaaaaaaaaa ¡ya te puedo postear! Yepaaaa. Me encantan las fotos, envidia sana, ya tú sabes. Espero que estés disfrutando de cada día al máximo y que Aotearoa te inspire y energetize para este futuro venidero que nos espera. :)
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